Definiciones de la mexicanidad

Parte de la misión y visión del Instituto de la Mexicanidad es dar a conocer un acercamiento al complejo concepto de “mexicanidad” para comprender nuestra identidad. A continuación enlistamos algunos autores y su definición e ideas acerca de la “mexicanidad”:

Abraham Moles

  • Mexicanidad es una alternativa positiva al nacionalismo tradicional. Tiene un contenido rico y sin exclusiones o reglamentaciones. Propone un estilo de vida como factor de integración  más potente que la nación, un concepto ya connotado negativamente en muchos países y en la juventud.

Agustín Basave

  • La mexicanidad es el modo común de ser [del hombre mexicano] en lo universal.
  • Es forjado por los mexicanos con su estructura permanente y sus variables históricas, sus etnias y su cultura; de sus realidades e ideales.
  • Son preceptos heredados o culturas importadas que han tenido que ser adaptados a la propia.
  • Como mexicanos tenemos una historia, un estilo y una vocación; “forjar una autentica filosofía —universalmente válida— construida por nacionales, con el inconfundible sello o estilo mexicano.  Sólo así podremos escapar del circunstancialismo nacionalista y arraigar nuestro pensamiento filosófico en la colectividad mexicana donde emerge.”
  • “Es una visión de conjunto —filosófica, histórica, psicológica, política, artística, jurídica, cultural— que respeta la riqueza de la heterogeneidad, que exalta nuestros valores y nos ilumina nuestro destino nacional.”
  • Existe formalmente en la inteligencia y fundamentalmente en los mexicanos.
  • Hay algo común que liga pasado, presente y futuro, es una unidad socio-cultural de ser, en una homogeneidad de esencia: estilo [de vida colectiva].
  • Para saber lo que somos es preciso conocer nuestras invariantes, nuestro contexto geográfico e histórico particular, nuestras etnias y nuestras tradiciones.
  • Para constituir una cultura mexicana: mexicanidad, se tiene que cimentar en la vocación histórica y en el estilo colectivo peculiar.
  • El ser mexicano no es únicamente la esencia. Lo mexicano en el sentido de ens (ente) significa habens ese (haber existencia). […] no es una mera mexicanidad desencarnada, sino lo mexicano informado por el actus essendi, el ser concreto especificado por una naturaleza sensible: hombres y cosas de México.
  • Mexicanidad implica dinamismo, autoposesión y autoplasticidad.
  • Integración de las realidades mexicanas en cuanto a objetos, que se ofrecen como  densificaciones estructurales de sentido —ciudades y paisajes de México, cultura mexicana, mexicanos, historia del pueblo mexicano, normas, instituciones, regiones de México— que vienen a integrarse de algún modo en la intimidad del mexicano, no como en un recipiente inerte, sino como síntesis orgánica de multifacéticas dimensiones vivenciales. La mexicanidad se va decantando en el pasado en las expectaciones del futuro en proyecto. Porque México no sería lo que es si no hubiese sido lo que fue y si no proyectase lo que se siente llamado a ser.
  • El acceso a los diversos niveles de mexicanidad se ofrece como modo de dación de lo mexicano:
  1. La fisis o naturaleza mexicana como algo integrado en una dinámica universal, viva y creadora, frontal y sucesiva, compleja y expresiva.
  2. La etnia personal del mexicano inacabado, libremente creativo, despegado —hasta donde puede— de las totalizaciones naturales, autoplástico dentro de una estructura permanente —un estilo— y  unas constantes históricas.
  3. Cultura mexicana expresiva y funcional, estilizada y subordinada a la persona mexicana.
  4. El deber ser captado en experiencias concretas y plasmado en normas e instituciones, ordenador e infalsificable.
  • El proceso de la concientización íntegra de la mexicanidad sintetiza e incluye los siguientes momentos:
  1. Unificación de aspectos reales percibidos de lo mexicano.
  2. Eidetización  de lo mexicano —personas y cosas—elevándolo al orden transensorial de la mexicanidad.
  3. Enfoque y perspectivas formalizadoras del campo de la experiencia de lo mexicano.
  4. Articulación conceptual de planos, notas y aspectos diversos y selectivos de México.
  5. Asimilación de lo mexicano —pasado y porvenir— al tiempo vivido.
  6. Espiritualización de la forma —objetiva y subjetiva— de lo mexicano que se encuentra en su identidad nacional.
  7. Estimaciones axiológicas de la toma de conciencia de lo mexicano y del proyecto colectivo de empresa en lo universal.
  • Coeficientes explicativos de la cultura mexicana:
  1. Geográfico;
  2. Histórico;
  3. Lingüístico;
  4. Filosófico;
  5. Literario;
  6. Artístico;
  7. Político;
  8. Económico;
  9. Social; y
  10. Comunicativo.

Alfredo Zalce

  • Todo en México tiene para mí una fuerza secreta que me seduce. Su tradición y su esperanza en el futuro, la vida de su pueblo, la riqueza de su paisaje.

Andrés Molina Enríquez

  • El elemento mestizo es el elemento más fuerte, más numeroso y más patriota de [México]. En él debe continuar el Gobierno de la nación.

Antonio Caso

  • México necesita poseer tres virtudes cardinales para ser un pueblo fuerte: riqueza, justicia e ilustración. Volved los ojos al suelo de México, a los recursos de México, a los hombres de México, a nuestras costumbres y nuestras tradiciones, a nuestras esperanzas y nuestros anhelos, a lo que somos en verdad.

Antonio Velasco Piña

  • La mexicanidad es esa herencia espiritual y cultural que se ha ido desarrollando en México a lo largo de miles de años.

Benito Juárez

  • Se había luchado contra la invasión extranjera para defender los derechos, la independencia y las instituciones políticas de México. En lo sucesivo, sólo una labor de cooperación entre pueblo y gobierno podría conducir al buen éxito.
  • ¿Por qué México, mi país, es tan extraño que está formado, a mitad y mitad, de una fuente inagotable de ternura y de un pozo profundo de bestialidad?

Carlos Fuentes

  • México es un país herido de nacimiento, apapachado por la leche del rencor, criado con el arrullo de la sombra.
  • México es un país de fatalidades dinámicas… Un país con demasiadas insatisfacciones sepultadas en el tiempo, largos siglos de pobreza, de injusticia, de sueños soterrados.
  • México: las manos vacías de pan, pero la cabeza llena de sueños.

Carlos Monsiváis

  • México pertenece incondicionalmente a la cultura occidental, a cuyo banquete se llega tarde pero con entusiasmo.
  • […] así la cultura nacional parezca el espacio de los caprichos y temperamentos sexenales, posee un vigor persuasivo que, en sus momentos culminantes, resume o trasciende perspectivas de clase, intereses del Estado, reivindicaciones democráticas, estallidos revolucionarios. No se trata de un fenómeno metafísico ajustable a expresiones como «la Idiosincrasia» o el «Ser Nacional», sino de prácticas arraigadísimas y formas expresivas que participan igualmente del adelanto y del atraso, del estímulo y la humillación.
  • Según las atribuciones gubernamentales, la ‘identidad nacional’ es dócil esencia, el espíritu de un pueblo que se contempla en el espejo de virtudes de un museo de artesanías, el viacrucis histórico que culmina en la obediencia voluntaria. Para la industria cultural, la ‘identidad’ es sucesión de lujos emocionales, pasiones ordenadas por la fatalidad de la raza, que van del gusto por la muerte a la delectación machista, de la irresponsabilidad a la compulsión gregaria.
  • De existir, la ‘identidad nacional’ es una gran síntesis de necesidades de adaptación y sobrevivencia, y por tanto algo siempre modificable, una identidad móvil, si esto es dable.
  • Al ser México una colectividad normada por el centralismo, las expresiones populares que se divulgan como ‘identidad nacional’ son, en primer lugar, las de la capital de la República.
  • Si la ‘identidad nacional’ varía según las clases, también y muy profundamente, según los sexos. La nación enseñada a los hombres ha sido muy distinta a la mostrada e impuesta a las mujeres. Esto explica la invisibilidad social y esto fundamenta la hegemonía del clero sobre un sector, el femenino […].
  • [En el siglo XIX] La ‘identidad’ fue el miedo y el odio a la autoridad que el relajo enmascara, las redistribuciones del orden dentro del caos, los calificativos morales que no impedían las conductas naturales, la incomprensión teórica de los procesos históricos, la idea de política como la maldición mudable y eterna que nos somete a la corrupción para salvarnos periódicamente de la represión. Así se identificaron los nacionales y los capitalinos.
  • Separada de sus cánones gubernamentales, la mexicanidad deviene en las masas vía existencial de comprensión del mundo. De nuevo, se funden cultura urbana e ‘identidad nacional’, ya no el corpus de tradiciones, sino la manera en que el instinto colectivo mezcla realidades y mitologías, computadoras y cultura oral, televisión y corridos, para orientarse animadamente en un mundo que, de otro modo, sería todavía más incomprensible.
  • […] es tan difícil o impreciso el uso del término ‘identidad nacional’, por esa enorme mutabilidad que varía según funcione en barrios, o vecindades o colonias residenciales o condominios o unidades habitacionales de burócratas o colonias populares o ciudades perdidas o rancherías o poblados indígenas o zonas fronterizas.
  • México es, a la vez, un país más unificado y más plural de lo que se piensa. Si ya no es creíble la vigencia de creencias y tradiciones que correspondan a una mentalidad extinta, tampoco es desdeñable el peso vivo de muchos otros hábitos y prácticas.
  • […] la identidad de un país no es una esencia ni el espíritu de todas las estatuas, sino creación imaginativa o crítica, respeto y traición al pasado costumbrista, lealtad a la historia que nunca se acepta del todo.
  • […] la identidad nacional no es lo opuesto a la internacional, sino el método para interiorizar una condición internacional (la explotación bajo el capitalismo) sin mayores consecuencias, sin lesiones todavía más graves en lo psíquico, lo moral, lo social, lo cultural.
  • La Mexicanidad se divide en las tradiciones que el hogar y las culturas regionales preservan como pueden, y las tradiciones que el comercialismo inventa.

Daniel Cosío Villegas

  • La imagen de México era, al fin de cuentas, una construcción centralista.
  • México viene padeciendo hace ya algunos años una crisis que se agrava día con día; pero como en los casos de enfermedad mortal en una familia, nadie habla del asunto, o lo hace con un optimismo trágicamente real.
  • La crisis [de México] proviene de que las metas de la Revolución se han agotado, al grado de que el término mismo de revolución carece ya de sentido. Y, como de costumbre, todos los grupos políticos continúan obrando guiados por los fines más inmediatos, sin que a ninguno parezca importarle el destino final del país.
  • La aspiración única de México es la renovación tajante, una verdadera unificación, que sólo se conseguirá a satisfacción con el fuego que arrase hasta la tierra misma en que creció tanto mal.
  • [México] está en una crisis política y moral de grave trascendencia, y si no se la reconoce y admite, y si no se hace el mejor de los esfuerzos para remediarla, México caminará a la deriva, perdiendo un tiempo que un país tan retrasado en su evolución no puede perder; o se hundirá, para no rehacerse quizás con una personalidad propia.
  • Si México no se orienta pronto y firmemente, pude no tener otro camino que confiar su porvenir a Estados Unidos.
  • Si no se reafirman los principios, sino que simplemente se los escamotea; si no se depuran los hombres, sino que simplemente se les adorna con vestidos o títulos, entonces no habrá en México autorregeneración, y, en consecuencia, la regeneración vendrá de afuera y el país perdería mucho de su existencia nacional y aun largo plazo no muy largo.

David Herbert Lawrence

  • ¡México! El gran país, salvaje, escarpado, seco, con una hermosa iglesia en cada paisaje, surgiendo como quien dice de la nada. Un paisaje destrozado por las revoluciones, con iglesias altas, bellas, fascinadoras, cuyas cúpulas parecen globos a punto de estallar, y cuyos pináculos y campanarios son como las trémulas pagodas de una raza irreal.

Elena Poniatowska

  • Quienes me dieron la llave para abrir a México fueron los mexicanos que andan en la calle.

Fernando del Paso

  • […] me duele hasta el alma que nuestra patria chica, nuestra patria suave, parece desmoronarse y volver a ser la patria mitotera, la patria revoltosa y salvaje de los libros de historia.

Frida Kahlo

  • México está como siempre desorganizado y dado al diablo, sólo le queda la inmensa belleza de la tierra y de los indios.

Gabino Barreda

  • La fórmula para exponer la destrucción del antiguo régimen: la emancipación intelectual.
  • La divisa de los mexicanos sería la libertad, el orden y el progreso; la libertad como medio; el  orden como base y el progreso como el fin.
  • Una cultura al servicio de la colectividad.
  • La ciencia como instrumento de concordia para reorganizar a la sociedad y el mejoramiento humano. Enseñar sólo lo que fuera científicamente comprobable. Que sirviera para preparar hombres, darle a la juventud la base intelectual necesaria para hacerla más apta en la lucha por la vida.

Ignacio Ramírez «El Nigromante»

  • Primero el pueblo de México libre y soberano; que luego venga la constitución progresista que sirva efectivamente al primero.

Jaime Torres Bodet

  • ¿En cuáles horas de nuestra vida fue cultivo de nuestro pueblo nuestra cultura? ¿Y en cuáles otras resultó apenas inicua tala lo que debía, siguiendo el símil, ser fértil poda? ¿Cuándo se aproximaron el saber y la técnica a nuestro huerto, para cuidar la esperanza de una cosecha? ¿Y cuándo, en cambio, se aproximaron para tallar, en el tronco sin hojas, el asta a lo largo de cuyos flancos manos audaces se levantaron para izar pabellones de extranjería? ¿En qué puntos se anticipó al ocaso de la colonia el amanecer de la independencia? ¿Y en qué otros, bajo la piel de la independencia, continúo circulando, por las arterias de la República, la angustia de la colonia?

Jesús Silva Herzog

  • Les dije muchas veces que era menester conocer el país, que no conocíamos a menudo México, que no lo conocíamos bien, que no podía conocerse desde la capital de la República: que debían viajar, ir a los lugares distantes, ponerse en contacto con los trabajadores de las ciudades y de los campos.
  • Cuánta falta nos hace la honradez en este país, desde muy abajo hasta muy arriba; desde muy arriba hasta muy abajo.
  • ¡Estoy inconforme con mi patria porque la quiero hacer mejor!

Jorge Ibargüengoitia

  • La verdad es que mientras más enojado estoy con este país y más lejos viajo, más mexicano me siento.
  • El mexicano, como todos los pueblos educados en una ética rigurosa, está convencido de que el mundo está lleno de buenos y malos. Los buenos somos nosotros y los malos los demás.

José Agustín

  • Ya estuvo de todos esos pinches estereotipos de México -como-país-de-la-muerte-paraíso-infernal-, ¿está bien?

José Emilio Pacheco

  • Mi padre dijo que en México todos éramos indios, aun sin saberlo ni quererlo. Si los indios no fueran al mismo tiempo los pobres, nadie usaría esa palabra a modo de insulto.

José Gaos

  • Mexicanidad es una inabarcable multitud y multiformidad de cosas mexicanas, materiales e inmateriales, naturales y culturales, individuales y colectivas, insignificantes y grandiosas.

José María Morelos y Pavón

  • Morir es nada cuando por la Patria se muere.

José Vasconcelos

  • Mexicanidad es una manera de pensamiento que procede de la vida colectiva y en ella arraiga.
  • Yo no he hecho un sistema por razones de patriotismo; pero sí puedo decir que el sistema y las reflexiones que lo han ido engendrando me han llevado a un patriotismo.
  • El fin de la educación es hacer hombres de bien, ciudadanos para la República, individuos para la humanidad.

Juan O’Gorman

  • México, para mí, representa el amor, la paz y todo aquello que es magnífico y maravilloso en el mundo.

Juan Villoro

  • México se trata de un país rico, pese a que casi la mitad de la población es pobre, aumenta el turismo, crecen las industrias y hay un ambiente cultural creativo enmarcado en una nación de ‘dos velocidades’.
  • México es un país inmensamente creativo atravesado por problemas que hacen que vivir ahí sea un deporte extremo, pero, a fin de cuentas, un deporte que se puede superar.
  • México engrandece a los aztecas pero olvida a sus descendientes.
  • No éramos mexicanos puros antes de la llegada de los españoles ni lo volvimos a ser con la independencia.
  • México está más allá de la tragedia de los velorios, está en una situación de absoluto desconcierto.
  • México es un país muy piramidal, donde la responsabilidad última de las cosas siempre se le atribuye al que está en la cumbre.
  • México es un país muy tradicional, muy difícil de movilizar, le tiene mucho miedo al cambio y no es fácil romper con estructuras que están consolidadas, como el PRI que está prácticamente en el ADN.
  • El metro como tantas otras metáforas en Ciudad de México, representa un sistema de segregación racial.
  • México se ha convertido en una gigantesca necrópolis.

Justo Sierra

  • Mexicanidad es pensar y asimilar nuestro peculiar modo de ser, con nuestro singular estilo.
  • Es nacionalizar la ciencia y mexicanizar el saber.
  • La educación no debe conducir a la formación de “una patria ideal de almas sin patria”; la verdadera educación es aquella que, acudiendo a todas las fuentes de cultura, “se propusiera adquirir  los medios de nacionalizar la ciencia, de mexicanizar el saber”.
  • Convertir al terrígena en un valor social (sólo por nuestra apatía no lo es) convertido en el principal colono de una tierra intensivamente cultivada, identificar su espíritu y el nuestro por medio de la unidad del idioma, de aspiraciones de amores y de odio, de criterio mental y de criterio moral; encender ante él el ideal divino de una patria para todos, de una patria grande y feliz; crear en suma el alma nacional, ésta es la meta asignada al esfuerzo del porvenir, éste es el programa de la educación nacional.
  • Si se pueden olvidar en las puertas del laboratorio al espíritu y a la materia, como Claudio Bernard decía, no podemos moralmente olvidarnos ni de la humanidad ni de la patria.

Luis González y González

  • México revela muy poco de su ser cuando se lo mira como una unidad nacional.

Miguel Alemán Valdés

  • Ciertamente, México tiene graves problemas que exigen una solución inmediata. Pero la solución de esos problemas sólo podremos emprenderla con la cooperación decidida y sincera de todo el pueblo mexicano.

Octavio Paz

  • El mexicano no quiere ser ni indio, ni español. Tampoco quiere descender de ellos. Los niega. Y no se afirma en tanto que mestizo, sino como abstracción: es un hombre. Se vuelve hijo de la nada.
  • Toda la historia de México desde la Conquista hasta la Revolución puede verse como una búsqueda de nosotros mismos, deformados o enmascarados, con instituciones extrañas y de una forma que nos exprese.
  • No sé si la modernidad es una bendición, una maldición o las dos cosas. Sé que es un destino: si México quiere ser tendrá que ser moderno.

Pedro Ramírez Vázquez

  • El respeto a la tradición y por lo tanto a México consiste en conservar las constantes culturales mediante soluciones contemporáneas propias, apoyadas en técnicas actuales para satisfacer las necesidades presentes de los espacios que vive el mexicano.

Roger Bartra

  • Los estudios sobre ‘lo mexicano’ constituyen una expresión de la cultura política dominante. Esta cultura política hegemónica se encuentra ceñida por el conjunto de redes imaginarias de poder, que definen las formas de subjetividad socialmente aceptadas, y que suelen ser consideradas como la expresión más elaborada de la cultura nacional.
  • […] el carácter del mexicano es una entelequia artificial: existe principalmente en los libros y discursos que lo describen o exaltan, y allí es posible encontrar las huellas de su origen: una voluntad de poder nacionalista ligada a la unificación e institucionalización del Estado capitalista moderno.
  • El carácter nacional mexicano sólo tiene, digamos, una existencia literaria y mitológica; ello no le quita fuerza o importancia, pero nos debe hacer reflexionar sobre la manera en que podemos penetrar el fenómeno y sobre la peculiar forma en que se inserta en la estructura cultural y social de México.
  • ¿Vamos a entrar en el tercer milenio con una conciencia nacional que es poco más que un conjunto de harapos procedentes del deshuesadero del siglo XX, mal cosidos por intelectuales de la primera mitad del siglo XX que pergeñaron un disfraz para que no asistamos desnudos al carnaval nacionalista?
  • La definición de ‘el mexicano’ [en los autores del siglo XX] es más bien una descripción de la forma como es dominado y, sobre todo, de la manera en que es legitimada la explotación.
  • […] los mexicanos que han resultado de la inmensa tragedia -que se inició en la Conquista y terminó en la Revolución- son habitantes imaginarios y míticos de un limbo violentado. El atraso y el subdesarrollo han terminado por ser vistos como manifestaciones de una infancia perenne e inmóvil que perdió su inocencia primitiva. El mito del edén subvertido es una fuente inagotable en la que se abreva la cultura mexicana. La definición actual de la nacionalidad le debe su estructura íntima a este mito.
  • La cultura mexicana ha tejido el mito del héroe campesino con los hilos de la añoranza.
  • Es preciso reconocer que una buena parte de lo que se llama el ‘ser del mexicano’ no es más que la transposición, al terreno de la cultura, de una serie de lugares comunes e ideas-tipo que desde antiguo la cultura occidental se ha forjado sobre su sustrato rural y campesino.
  • La cultura mexicana de la primera mitad del siglo XX ha creado un formidable mito: los mexicanos llevan dentro, como un homúnculo, al indio, al bárbaro, al salvaje, al niño.
  • La concepción dualista de México es una verdadera obsesión que comparten muchos escritores, políticos y antropólogos. Hay dos Méxicos: uno es rural y bárbaro, indígena y atrasado; el otro es moderno y urbano, industrial y mestizo. […] Esta dualidad cumple una función determinante en la anatomía de la cultura política moderna: ella es parte indisoluble del metadiscurso legitimador del Estado mexicano. La dualidad preside la constitución y organización del alma nacional.
  • México es un paraíso para las expediciones psicoanalíticas que buscan las fuentes del complejo de Edipo: ¿acaso hay algo más fascinante que esa peculiar combinación de machismo exacerbado y de fanático amor a la madre en la figura de la Virgen de Guadalupe?
  • Los mitos fundacionales del ‘alma mexicana’ nos conducen directamente dos fuentes originarias y aparentemente contrapuestas: por un lado, la virgen-madre protectora de los desamparados, la guadalupana; por otro lado, la madre violada y fértil, la chingada, la Malinche. […] Este arquetipo de la mujer mexicana es la dualidad Malintzin-Guadalupe. Es la Chingadalupe, una imagen ideal que el macho mexicano debe formarse de su compañera, la cual debe fornicar con desenfreno gozoso y al mismo tiempo ser virginal y consoladora.
  • […] la definición del carácter nacional no es un mero problema de psicología descriptiva: es una necesidad política de primer orden, que contribuye a sentar las bases de una unidad nacional a la que debe corresponder la soberanía monolítica del Estado mexicano.
  • La cultura nacional mexicana ha usado extensamente el arquetipo melancolía/metamorfosis, se ha aprovechado ampliamente de sus potencialidades mediadoras y lo ha plasmado en el canon del axolote. […] Sin embargo, el canon del axolote no es un instrumento de análisis para interpretar textos literarios ni para explicar peleas de box: su función es la de permitirnos ubicar la presencia en la cultura nacional de procesos legitimadores del sistema político, e identificarlos en los contextos heterogéneos en que se encuentran alojados.
  • Los mexicanos han sido expulsados de la cultura nacional; por eso, cada vez rinden menos culto a una metamorfosis frustrada por la melancolía, a un progreso castrado por el atraso. Los mexicanos cada vez se reconocen menos en ese axolote que les ofrece el espejo de la cultura nacional como paradigma de un estoicismo nacionalista unificador.

Román Piña Chan

  • El pasado prehispánico de México […] es también la raíz y esencia del mexicano actual, en su proceso de búsqueda e integración de una cultura propia.

Rufino Tamayo

  • Soy muy mexicano, no tiene remedio. En donde he estado, lo que me alimenta es México.

Samuel Ramos

  • México se ha alimentado, durante toda su existencia, de cultura europea, y ha sentido tal interés y aprecio por su valor, que al hacerse independiente en el siglo XIX la minoría ilustrada, en su empeño de hacerse culta a la europea, se aproxima al descastamiento.
  • Para la edad que tiene México, ha cambiado muy poco. Nuestros cambios son más aparentes que reales; son nada más disfraces diversos que ocultan el mismo fondo espiritual.
  • El mexicano es idealista, porque el idealismo exalta la idea que tiene de su personalidad. El fin de su acción, como individualista que es, no está en la obra misma, sino en la afirmación del individuo.
  • Al nacer México, se encontró en el mundo civilizado en la misma relación del niño frente a sus mayores. Se presentaba en la historia cuando ya imperaba una civilización madura, que sólo a medias puede comprender un espíritu infantil. De esta situación desventajosa nace el sentimiento de inferioridad que se agravó con la conquista, el mestizaje, y hasta por la magnitud desproporcionada de la Naturaleza.
  • La psicología del mexicano es resultante de las reacciones para ocultar un sentimiento de inferioridad.
  • La nota del carácter mexicano que más resalta, a primera vista, es la desconfianza. No es una desconfianza de principio, porque el mexicano generalmente carece de principios. Se trata de una desconfianza irracional que emana de lo más íntimo del ser.
  • La vida mexicana da la impresión, en conjunto, de una actividad irreflexiva, sin plan alguno. Cada hombre, en México, sólo se interesa por los fines inmediatos. Trabaja para hoy y mañana, pero nunca para después.
  • El mexicano tiene habitualmente un estado de ánimo que revela un malestar interior, una falta de armonía consigo mismo. Es susceptible y nervioso; casi siempre está de mal humor y es a menudo iracundo y violento.
  • El mexicano [es] un hombre que huye de sí mismo para refugiarse en un mundo ficticio.
  • [El mexicano] Tiene una susceptibilidad extraordinaria a la crítica, y la mantiene a raya anticipándose a esgrimir la maledicencia contra el prójimo. Por la misma razón, la autocrítica queda paralizada. Necesita convencerse que los otros son inferiores a él.
  • El mexicano es un hombre que durante años se ha empeñado sistemáticamente en contrariar su destino.
  • La virtud que más urgentemente hay que aconsejar al mexicano actual, es la sinceridad, para que arranque el disfraz con que se oculta a sí mismo su ser auténtico.
  • […] la historia de México, sobre todo en el plano espiritual, es la afirmación o negación de la religiosidad.
  • Como reacción emanada del nuevo sentimiento nacional, nace la voluntad de formar una cultura nuestra, en contraposición a la europea. Para volver la espalda a Europa México se ha acogido al nacionalismo… que es una idea europea.
  • Es necesario fomentar el interés y el respeto por las cosas mexicanas. Cuando nuestra realidad es observada sin ningún prejuicio desfavorable, se descubren valores insospechados cuyo conocimiento contribuirá, sin duda, a elevar la moral de la conciencia mexicana.
  • El tono dominante en la política de México durante los últimos años es el radicalismo. La demagogia se ha encargado de propagar entre las masas doctrinas sociales extremas que carecen de arraigo en México, y que, teniendo en cuenta la realidad del país, resultan utópicas en absoluto.
  • Mexicanidad es iniciar la formación de una filosofía propia.
  • […] sigo creyendo que en México es una necesidad urgente el cultivo del pensamiento, la práctica de la reflexión, en todas y cada una de las actividades humanas. Todo pensamiento debe partir de la aceptación de que somos mexicanos y de que tenemos que ver el mundo bajo una perspectiva única, resultado de nuestra posición en él.
  • México necesita conquistar mediante la acción disciplinada de un auténtico pensamiento nacional.
  • Tareas encomendadas a nuestro pensamiento:
  1. Cómo es realmente tal o cual aspecto de la existencia mexicana; y
  2. Cómo debe ser, de acuerdo con sus posibilidades reales.

Serre

  • El alma de la patria es la conciencia que cada persona posee de sí misma y en relación con su medio social.
  • Juzgo que sólo debemos adoptar de otros pueblos aquello que no deforme ni debilite la integridad patria.
  • Siempre he creído que la imagen de la Patria es la mexicanidad, pues debe reflejarse esplendorosamente en el espíritu de los Mexicanos, porque allí se forma su arquetipo sublime y se integran sus emotivos elementos. Y en esa imagen es la que se fincan las más risueñas ilusiones de nuestro pueblo, será cada vez más bella y perfecta, a medida que la construyamos con los elementos más preciados de la razón y del sentimiento, hasta llegar a esos supremos ideales que nos devuelven la fe en la vida y nos dan la entereza para vivirla con dignidad.
  • Es necesario definir dos factores para facilitar posteriores explicaciones: el geográfico, que sella el destino de los pueblos con una marca inconfundible y forma el cimiento de las nacionalidades —en tanto la voluntad de vencer las resistencias del medio no es más poderosa que ésta— y el histórico que es la voz y el recuerdo de las naciones, y cuyas resonancias recónditas vibran en las más íntimas fibras de la raza, es decir, en las edificaciones originales de las culturas nativas.
  • Estos dos episodios, el de la Malinche y Guerrero, otorgan la síntesis de dos trayectorias divergentes en la colectividad mexicana, las cuales dan vida a la atracción de lo occidental y la novelería de lo extranjero, y a la extraña, potente, pasiva sugestión de lo indígena, que libra su pelea callada, silenciosamente, pero que acaba por triunfar absorbiendo al conquistador en un mestizaje cuya alma es indígena, aun cuando el intelecto sea europeo.
  • No es posible, por tanto, caracterizar lo mexicano en un solo tipo, como tampoco es factible ignorar que el mexicano de las grandes ciudades es bien diferente del mexicano de la provincia.

Bibliografía

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Poniatowska, Elena. (Cuadro de honor) “Discurso íntegro en la ceremonia de entrega del Premio Cervantes 2013” en la revista electrónica de educación Pálido de luz. México, número 44, mayo de 2014, artículo disponible en la página web: http://palido.deluz.mx/articulos/1799 Consultado el 9 de julio de 2022.

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Sierra, Justo. Discurso inaugural de la Universidad Nacional. México: UNAM (Colección Pequeños Grandes Ensayos), 2004. 54p.

Vasconcelos Calderón, José. La raza cósmica. México: Porrúa (Colección “Sepan Cuantos…” No. 719), 2019. 184p.

18 comentarios de “Definiciones de la mexicanidad”

      1. Buen día. He publicado algunas fuentes, pero debo seguir investigando las faltantes. Seguiremos añadiendo más definiciones, autores y bibliografía. Saludos y gracias por leernos.

  1. La postura de cada actor referente al concepto de mexicanidad es libre, y a lo que leí hay muchas manera de como definir mexicanidad pero para mi en lo personal mexicanidad es un termino al cual se le puede dar un significado muy amplio y diverso, también es el nacimiento de la cultura mexicana de nuestro pais como nacíon , es mezcla de muchas culturas. la mexicanidad es esa que nos distingue e identifica del resto del mundo.

  2. Definitivamente todos definen la mexicanidad de la misma forma, pero con otras palabras, ser orgulloso de tu pasado, presente y futuro como mexicano, amar la patria por la que cientos de personas pelearon y lucharon. Como una filosofía, una ciencia, con palabras profundas, dichas por personalidades orgullosas de ser nacidos en tierra azteca. ¡Viva México!

  3. Cada autor fija su concepto de Mexicanidad, en lo personal comparto la idea del primer punto que dijo Agustín Basave que es el modo de ser del hombre mexicano en lo universal; pero cada uno da diferentes conceptos a esto ya que otros lo ven como una manera de pensamiento de la vida del mexicano (José Vasconcelos) y que también coincide en eso Justo Sierra como su modo de pensar y asimilar el modo de ser con el estilo; y en cuanto a Serre lo afirmo directamente como sentir que es el alma de la patria la conciencia que cada persona posee de sí mismo. Concluyo que todos coinciden con su forma de conceptuar la Mexicanidad de ser orgullosos de esta nación.

  4. Definiría la mexicanidad como la identidad del mexicano y las identidades son hechas por la
    cultura, las tradiciones, la religión, la familia, la comida, la lengua y otros factores. Pero esta identidad es dinámica como lo son los factores que la componen. Ejemplo de esto es la lengua; en las regiones fronterizas y más adentro aun han penetrado palabras como troka o parkiar que son un ejemplo del dinamismo de nuestra manera de expresarnos. Además, muchas costumbres se van modificando u adaptando al contacto de otras identidades.
    Me quedo con la definición de Serre, El alma de la patria es la conciencia que cada persona posee de sí misma y en relación con su medio social.
    Abraham Moles complementa la definición de Serre y le agrega una misión para perpetuar la mexicanidad.

  5. Definitivamente la mexicanidad es parte de nuestra cultura, nuestro orgullo por ser mexicanos, la historia del antes y el después, entre mas pasa el tiempo mas historia importante se va labrando, lo mejor de todo, es que yo entiendo la mexicanidad como un símbolo de que somos libres, democráticos etc.

  6. Para algunos la Mexicanidad es un terminó con un significado tan amplio y diverso como el nacimiento mismo de la cultura mexicana la mexicanidad es una palabra prácticamente que define a una personas aquella,
    que se apasiona por el sentimiento, aquella que cuando son las fechas de celebración de mexico lo disfruta como nunca
    la palabra mexicanidad viene de haces muchos años donde ocurrieron acontecimientos muy importantes
    ya que con esas historias (acontecimientos) sentimos de pecho la palabra mexicanidad

  7. Cada quien explique su concepto de la mexicanidad pero en lo personal pienso todos los mexicanos debemos estar orgullosos de nuestra cultura y saber la historia del antes y el después porque entre mas pasa el tiempo mas va evolucionando nuestro historia y debemos siempre dar lo mejor por el país para poner un gran ejemplo del que dieron nuestros antepasados que fueron lo que nos dieron la libertad

  8. Aqui podemos ver que existen diferentes definiciones de lo que es mexicanidad, pero todas nos llevan a los mismo, mexicanidad es nuestro pasado, nuestro presente y nuestro futuro, toda la historia y la cultura que hemos ido forjando a traves de los años, por cosas materiales, inmateriales, naturales, colectivas, insignificantes y grandiosas.

  9. Obviamente se relaciona, entre diferentes palabras que aveces te hacen la ilucion de plasmarlo diferente, pero todo dirigido al mismo objetivo de poder sentirse orgulloso de ser mexicano sabemos que el pasado ah tenido altos y bajos, el presente se vive día a día. y el futuro es incierto, pero hay que vivirlo libre, y sobre todo, sentirse parte de la nación, yo jamas eh sentido ese «orgullo» pero afirmo que esto ah modificado un poco ese pensar.

  10. La Mexicanidad es todo lo que engloba a todos los mexicanos pero cada quien con su punto de vista pero mas que nada se relaciona con lo mismo con nuestra cultura, nuestra historia lo que a logrado y por lo que a pasado nuestro país a lo largo de estos años

  11. La mexicanidad es la que nos distingue de todos los demás lugares, la heredamos a lo largo de los años.
    mexicanidad es una inabarcable multitud y multiformidad de cosas mexicanas.
    es ser y estar orgullosos de toda nuestra nación.

  12. La palabra Mexicanidad, no solo es para marcar «Nacionalidad» si no es todo aquello que somos, el Orgullo de lo que somos!.

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